La activista Liliana Flores Benavides, líder del colectivo Nosotros, ha señalado una crisis en el combate a la corrupción en Nuevo León, afirmando que las leyes y el Sistema Estatal Anticorrupción están diseñados para evitar el castigo a funcionarios denunciados.
La lentitud en la resolución del proceso contra el exgobernador Jaime Rodríguez Calderón y exfuncionarios por el caso Ecovía ha generado críticas, y según la activista, la falta de castigo propicia que los funcionarios busquen a los mejores abogados para ampararse y obstaculizar las investigaciones.
Por su parte, el presidente de Fortaleza Ciudadana, Ángel Quintanilla, señaló que, a pesar de acusaciones documentadas contra varios funcionarios, la falta de investigaciones efectivas ha llevado a la percepción de que la fiscalía se creó para no castigar.
Ambos activistas subrayaron la importancia de revisar y fortalecer el sistema anticorrupción para garantizar la rendición de cuentas y la justicia en el estado.